lunes, 5 de noviembre de 2007

"No, señor, no es una rebelión, es una revolución."[1]

Doscientos años y no lo habían logrado. Ya era hora del cambio. La burguesía estaba determinada a utilizar la fuerza. La revolución se acercaba. La monarquía, conocida como despotismo en la época, finalmente conocería su fin. Desde el surgimiento de la burguesía en el ocaso de la Edad Media se habían reafirmado como un bloque de la sociedad con gran capital y poder, pero su poder era bastante limitado. Este “poder” se reducía a lo que podían lograr prestándole dinero al rey y a otras autoridades, mas no tenían real poder político. Durante los siglos que siguieron a la edad media, en, esta clase social ansió el poder y utilizaron el período de la ilustración en conjunto con la importancia que adquirieron gracias a la revolución industrial para lograr un definitivo avance. En esta época, difundieron la corriente intelectual del liberalismo, “que promueve las libertades civiles y el máximo límite al poder coactivo de los gobiernos sobre las personas “ [2]. Esta “filosofía” tuvo bastante repercusión en el grueso de la población terminando con las revoluciones liberales y el fin de la monarquía absolutista.

Para poder entender esta importante crisis social hay que conocer sus antecedentes. Entre estos y posiblemente el más importante es la Revolución Industrial. Dicha revolución consistió en la incorporación de maquinaria a los procesos de producción agilizando considerablemente la capacidad de producción. La industrialización centra la economía en el desarrollo industrial y no en el agrícola como era antes de la implementación de la reforma. Esta revolución crea la llamada Cuestión Social , “trastorno producido por el encuentro del progreso material con el decaimiento o relajación de los principios ético- sociales”[3]; este trastorno produce malestar en todas las clases sociales. Las clases obreras migran masivamente a las ciudades en busca de trabajo, ya que la nueva maquinaria permite a un hombre hacer el trabajo de varios. Por ejemplo en la industria textil, con la creación de la Spinning Jenny, (“hiladora multi-bobina (...) redujo la cantidad de trabajo requerida para producir hilo, dando a un solo trabajador la capacidad para trabajar con ocho o más carretes a la vez.”[4]) 1 de cada 8 obreros conservaba su trabajo, lo que deja a los 7 restantes desempleados y obligados a irse a la ciudad en busca de empleo; un efecto parecido tuvo la invención de la máquina a vapor y de otros artefactos. De esta forma nace el proletariados, “quienes se ven obligados a vender sus servicios por no poseer las herramientas para producir bienes”[5] y viven en extremas condiciones de hacinamiento, higiene y alimentación. La Revolución Industrial es sólo el componente económico de las Revoluciones Liberales, el factor social lo comprenden las Revoluciones Burguesas. Dentro de las revoluciones burguesas nos centraremos en la Revolución Francesa, en la que se inspiran las otras revoluciones liberales que sucederán en el resto de Europa Occidental(aunque a futuro repercutirán más allá del continente). La Revolución Francesa y el resto de las revoluciones burguesas se originan en el malestar de la gente producido por el exceso de poder que concentraban los reyes, lo que paulatinamente los corrompía, transformándolos en déspotas; además de la gran importancia económica, pero no política que ostentaba la burguesía, la disminución de los precios agrícolas y la hambruna que se aproximaba (cada vez se producía menos y los nobles compraban, debido a su bajo precio, grandes cantidades de trigo, casi sin dejar para la población más pobre). Las ideas de la ilustración, principalmente las del liberalismo, fueron tomadas de muy buena forma por los burgueses en ascenso y las indignadas clases bajas. Se comienza a pensar que el rey no debería ostentar tanto poder ni menos poseer llamativos y múltiples castillos si el pueblo sufría de hambre. Centrándonos de lleno en la Revolución Francesa, en la cual todos los factores anteriormente mencionados influyeron, se destaca que hubo un fuerte resentimiento en contra del actual rey, Luis XVI, debido a los grandes derroches que producía, dejando con graves déficit monetarios al fisco; estos derroches comprendían desde las construcciones de palacios opulentos hasta la ayuda monetaria interesada prestada a las colonias norteamericanas para que consiguieran su independencia de Inglaterra. El 11 de Julio de 1789 es despedido el ministro de finanzas, quien era partidario de un sistema de gobierno más igualitario. El pueblo esta muy indignado y la revolución estalla. Tres días después, se realizará la famosa Toma de la Bastilla, un símbolo del despotismo, “el eco de este acontecimiento llegará hasta Rusia”[6]. El 4 de agosto de 1789, se abole el feudalismo, “eliminando las prebendas que recibía el Primer Estado (el clero) y los derechos señoriales del Segundo Estado (los nobles)”[7]. En 1790 se elimina el derecho de la Iglesia de cobrar impuestos sobre las cosechas. En 1791 se redacta una constitución la cual Luis XVI se ve obligado a aceptar. El rey compartía el poder con una Asamblea, pero conservaba el derecho a cancelar cualquier decisión del parlamento y a elegir a sus ministros. Desde ese entonces empieza a escucharse cada vez más la palabra “Republica” y al año siguiente, se instaura el régimen anteriormente mencionado y se concreta la abolición de la monarquía; luego de haber asaltado el Palacio de las Tullerías el 10 de agosto de 1792. El hecho tuvo tal impacto que hasta se adoptó un nuevo calendario que tomaría como año 1 el 1792, por ser el año de la revolución, eliminando toda referencia religiosa del calendario. El nuevo gobierno cae sobre un órgano llamado Convención. Ese mismo año a Francia se le pide que devuelva la monarquía, sino, sería invadida por Austria y el Sacro Imperio Romano Germánico(los países que hicieron la gestión); la petición no se toma en cuenta y acusados de conspiración con Austria se guillotina a Luis XVI y a María Antonieta de Austria, su esposa. La ejecución de María Antonieta causa una revolución por la sucesión de la Reina en Austria. En los años siguientes se ocasionan revueltas y golpes de estado en Francia entre los diferentes grupos partidarios de la revolución, la cual culmina con el golpe de estado de Napoleón Bonaparte en el año 1799, dando fin a las revueltas francesas; sin embargo, ya se habían reflejado intelectual y moralmente en Europa Occidental, lo que causaría la paulatina anulación de las monarquías Europeas.

A pesar del revuelo social que se produjo por la Revolución Industrial, sus consecuencias fueron positivas: llevaron a las revoluciones liberales, las que anularon la monarquía y constituyeron las bases del mundo contemporáneo y de la administración estatal que al día de hoy conocemos. Estas reformas logradas mediante revoluciones son las que construyen nuestra mentalidad y valores cívicos hoy en día. Como se dijo al comienzo, ya era hora del cambio.

Fernanda González C.



[1]http://es.wikipedia.org/wiki/Toma_de_la_Bastilla; Conversación de Luis XVI con un duque francés - "Pero ¿es una rebelión?" preguntó Luis XVI. - "No, señor, no es una rebelión, es una revolución."

[2] http://es.wikipedia.org/wiki/Liberalismo

[3] http://es.wikipedia.org/wiki/Cuesti%C3%B3n_social

[4] http://es.wikipedia.org/wiki/Spinning_Jenny

[5] http://es.wikipedia.org/wiki/Proletariado (Concepción de Karl Marx)

[6] http://es.wikipedia.org/wiki/Toma_de_la_Bastilla

[7] http://es.wikipedia.org/wiki/Revoluci%C3%B3n_Francesa

5 comentarios:

Tercero A dijo...

Me gusta que haya utilizado una frase textual para titular su ensayo, ya que deja claro cual va a ser el tema tratado, el que fue muy bien expuesto durante su desarrolla. tuvo preocupación para investigar el tema el que lo planteó con profundidad.
Sus conclusiopnes también eras buenas, pues hace un enlace con la mentalidad y valores cívicos de la sociedad actual.

Karen Viorklumds

Tercero A dijo...

Buen Ensayo. Se aborda de manera muy completa el tema de las revoluciones liberales, enfatizando en sus componentes(Revolución Industrial y Burguesas) y ejemplificando con la Revolución más importante de las liberales: La Revolución Francesa. Buenas consideraciones y conclusiones finales.

Tercero A dijo...

Buen Ensayo. Se aborda de manera muy completa el tema de las revoluciones liberales, enfatizando en sus componentes(Revolución Industrial y Burguesas) y ejemplificando con la Revolución más importante de las liberales: La Revolución Francesa. Buenas consideraciones y conclusiones finales.

Javier Rodriguez G.=)

Meli dijo...

Interesante ensayo.
El titulo llama mucho la atencion, haciendo mas interantes leerlo.
Es muy completo y esta bien desarrollado en todo momento. Buena introduccion y conclusion.

Unknown dijo...

Me gusto el ensayo, la forma de redaccion no lo hace algo fome si no que dan ganas de seguir leyendolo, esta muy completo y las conclusiones me parecen muy bien hechas como termino de este tema.


Felipe Saavedra :D